Estudiantes de Temuco Valparaíso y Colombia trabajan unidos para fortalecer la comunidad a través de la fe y el servicio.
Entre el 4 y el 12 de enero de 2025, las pastorales de la Universidad Católica de Temuco (UCT) y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) se unen por tercer año consecutivo para llevar a cabo las Misiones de Verano en la comuna de Curacautín. Bajo una iniciativa que refuerza el compromiso de ambas instituciones con la evangelización y el apoyo a comunidades locales.
El programa de misiones, en colaboración con la Parroquia San Pedro de Curacautín, busca promover un encuentro personal y comunitario con Jesucristo, abordando las necesidades humanas y espirituales de la comunidad. Los 42 estudiantes participantes, provenientes de ambas universidades, se sumarán al esfuerzo pastoral para compartir el Evangelio a través de celebraciones litúrgicas, formación y servicio.
Ceremonia de envío con participación internacional
La iniciativa comenzó con una Misa de envío, celebrada el sábado 4 de enero en el Templo Jesús Maestro del Campus San Juan Pablo II de la UCT, ceremonia que marcó el inicio de esta misión. La liturgia fue Presidida por el Padre Pbro. Leonardo Villagrán Santana, vice gran canciller de la UC Temico, quien a través de un momento de fe y compromiso, también dio la bienvenida a dos estudiantes de la Universidad Católica de Manizales, Colombia, participantes del Programa de Voluntariado Misionero Intercontinental de la Red de Pastoral Universitaria de ODUCAL.
Durante su homilía, el Padre Villagrán motivó a los jóvenes a ser testigos vivos del amor de Dios, instándolos a llevar “la palabra del Señor” y a ser “luz en el camino de quienes más lo necesitan”.
El Rector de la UCT, Aliro Bórquez Ramírez, se dirigió a los misioneros con un mensaje de motivación y orgullo de ver “ver cómo el sello distintivo de la universidad se vive en cada uno. Sigan adelante, llevando la palabra de Dios, siendo mensajeros”. Además, resaltó que estas misiones representan los valores fundamentales de la institución, promoviendo la unidad y la fe entre los jóvenes.
Solidaridad internacional y trabajo comunitario
María Fernanda Florez, es una de las estudiantes que se unió a las Misiones de Verano gracias al Programa de Voluntariado Misionero Intercontinental de la Organización de Universidades Católicas de América Latina (ODUCAL), programa que permite a estudiantes de diferentes países vivir experiencias de fe y servicio en comunidades que requieren apoyo. María Fernanda, junto a otra compañera de la Universidad Católica de Manizales, se unió al grupo de jóvenes chilenos para fortalecer el trabajo misionero en Curacautín.
“Me siento muy afortunada y bendecida por esta oportunidad tan maravillosa. Es una alegría inmensa poder ser parte de este encuentro de fe y solidaridad”, expresó con entusiasmo al hablar de su experiencia inicial en las misiones.
Durante su estadía en la comuna de Curacautín, los jóvenes misioneros realizarán una labor integral que incluye tareas pastorales, evangelizadoras y sociales. A través de sus profesiones y de la palabra, trabajarán directamente con las personas, apoyándolas en sus necesidades espirituales y materiales, mientras fortalecen la comunidad y transmiten un mensaje de esperanza y fraternidad.